Nos adentramos en el fútbol de la República Democrática Alemana. Deteniéndonos en su único éxito internacional, la Recopa conquistada sorprendentemente por el Magdeburgo.

El Magdeburgo conquistó la Recopa de Europa en 1974. Un hecho que en sí mismo merece ser recordado. Pero aquel éxito tiene una importancia histórica que da mayor relevancia a esa victoria. Aquel triunfo supuso el único título europeo conquistado por un equipo de la República Democrática Alemana (RDA).

Tras la II Guerra Mundial, Alemania quedó dividida en dos países. Las potencias vencedoras dividieron el territorio alemán en cuatro zonas de ocupación. Las tres del oeste bajo control estadunidense, británico y francés. La del este de jurisdicción soviética. La ciudad de Berlín, situada dentro de la zona de ocupación soviética reproducirá el mismo esquema de división. Por tanto, de las cenizas de la guerra surgen dos países antagónicos entre sí.

Las áreas de ocupación serán el germen de la división de Alemania. Los territorios alemanes controlados por estadunidenses, británicos y franceses constituirán una República Federal. Su modelo económico estaba basado en una economía de mercado. Por tanto, una democracia occidental de corte capitalista.

El Magdeburgo conquistó la Recopa de Europa en 1974. Un hecho que en sí mismo merece ser recordado. Pero aquel éxito tiene una importancia histórica que da mayor relevancia a esa victoria. Aquel triunfo supuso el único título europeo conquistado por un equipo de la República Democrática Alemana

En contraposición, los territorios alemanes controlados por los soviéticos conformaron una Republica que se denominará a sí misma como República Democrática. Su modelo político será de partido único. El Partido Comunista será el eje del sistema. El sistema económico se basará en la planificación estatal.

El fútbol en la República Democrática Alemana se organizó rápidamente. Como casi todo en la Alemania del Este, su desarrollo estuvo muy vinculado al Estado. En 1949 ya existía una Liga en el país. Surge la Oberliga. Competición que se jugó con el calendario soviético hasta 1961. Un extraño guiño a los “camaradas” rusos. Sin embargo, finalmente en los años sesenta las autoridades decidieron adaptar la competición al sistema tradicional de temporada europea. Mucho más lógico por la situación geográfica del país.

La Oberliga la disputaban catorce equipos, había dos puestos de descenso por temporada. En sus inicios, los jugadores de aquella competición eran casi todos funcionarios. Su actividad principal no era el fútbol, eran simples trabajadores con cualidades futbolísticas.

En las primeras décadas de la Oberliga, los equipos que integraban el campeonato tuvieron escaso éxito en las competiciones europeas de fútbol. Esto provocó mucha inquietud en las autoridades políticas del país. En la RDA el deporte era visto como una poderosa herramienta de exaltación ideológica. A través de los éxitos deportivos se intentaba proyectar las bondades del sistema. El deporte debía ser el reflejo de la construcción de un ser humano nuevo. El fútbol, en contraposición a otros deportes, no estaba contribuyendo a ello. Por este motivo el Gobierno decidió intervenir y restructurar la competición.

El principal objetivo de todos estos cambios era cosechar victorias en las competiciones internacionales de fútbol. Para ello se fusionaron multitud de equipos. Los jugadores empezaron a tener dedicación exclusiva. Por ultimo las instituciones estatales comenzaron a intervenir directamente en la gestión de los equipos.

El ejemplo paradigmático del intervencionismo estatal en el fútbol de la RDA será el Dinamo de Berlín. Equipo vinculado a los servicios secretos, la temida Stasi. El club berlines pasó a ser dirigido por el ministro de Seguridad del Estado, Erich Mielke. Con semejante mecenazgo no es de extrañar que el Dinamo de Berlín conquistara diez campeonatos de liga seguidos. Desde 1978 a 1988 se proclamó campeón de la Oberliga.

Los esfuerzos por hacer el fútbol de la RDA más competitivo fructificaron en los años 70. Alemania del Este consiguió clasificarse para el Mundial de 1974. Su única participación en un Campeonato del Mundo de fútbol. Meses antes de aquel evento, el 8 de mayo de 1974 el Magdeburgo conseguiría el único título europeo de un equipo de fútbol de la RDA. Además, lo logró en una vibrante final contra el todopoderoso Milán. Para regocijo del gobierno de la RDA unos alemanes orientales alzaban la Recopa de Europa.

Aquella inolvidable final se jugó en Roterdam. Sin lugar a duda ese partido se convirtió en la página más exitosa del fútbol de la RDA. Su protagonista fue el modesto Magdeburgo, equipo que sorprendentemente se había alzado con la Copa de la Alemania del Este en 1973.

La victoria copera abrió las puertas de la Recopa al Magdeburgo. Tras eliminar sucesivamente al Breda, al Banik Ostratova de Checoslovaquia, al Beore Stara de Bulgaria y al Sporting de Lisboa, se plantaron en la final contra el Milán, entrenado por Cesare Maldini. Un contundente dos a cero hizo alcanzar la gloria a los alemanes orientales.

Aquel éxito del Magdeburgo pudo haber supuesto un cambio en el fútbol de la RDA. Pero no fue así. Los males endémicos de la Alemania oriental afloraron en el fútbol. La Oberliga estuvo condicionada por la arbitrariedad y las corruptelas.

Aquel éxito del Magdeburgo pudo haber supuesto un cambio en el fútbol de la RDA. Pero no fue así. Los males endémicos de la Alemania oriental afloraron en el fútbol. La Oberliga estuvo condicionada por la arbitrariedad y las corruptelas. Las injerencias de Erich Mielke fueron constantes a favor de su equipo.

Los mejores jugadores del país eran fichados por el equipo de la Stasi. Los árbitros eran muy benévolos con el Dinamo, penaltis a favor y goles en fuera de juego. Incluso expulsiones de los jugadores más relevantes del equipo que se enfrentaría al Dinamo de Berlín la jornada previa. Con una competición tan adulterada era difícil alcanzar niveles competitivos que permitieran más éxitos europeos. Además, en el fútbol, el sistema de dopaje de la RDA tuvo escasa eficacia. Se trata de un deporte donde prima más el talento que la condición física.

Por tanto, la Recopa conquistada por el Magdeburgo en 1974 fue la única victoria internacional del fútbol de la RDA. Un éxito histórico, más por lo peculiar del contexto que por la relevancia deportiva. Hoy el Magdeburgo compite en el tercer nivel del fútbol alemán. Un fútbol de un país unido. Donde los equipos del este apenas tienen capacidad para sobrevivir. Incapaces de adaptarse al nuevo sistema que surgió tras la caída del muro y la extinción de la RDA. Para muchos de ellos, cualquier tiempo pasado les parece mejor. Posiblemente al Magdeburgo también. Un equipo que un día reinó en Europa.

2 thoughts on “La Recopa del Magdeburgo. Único éxito internacional del fútbol de la RDA

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