Si hay algo que caracteriza las vidas de los seres humanos es que cada una de ellas son totalmente diferentes entre sí. Compartir la vida con gente de calidad hace que esta sea una experiencia apasionante. El filósofo francés Jean-Bertrand Pontalis decía que las personas “estamos hechos de mil otros”. Afortunadamente a lo largo de mi vida he tenido la suerte de encontrar personas que me han hecho aprender y disfrutar a través de miles de conversaciones. Un apasionado del fútbol agradece una buena conversación sobre este deporte y valora mucho a aquellas personas que te la proporcionan.  

Una de esas personas que han dado emoción a mis experiencias futbolísticas es Sergio, compañero en la rutina de la oficina. La habitual y aburrida monotonía diaria que proporcionan los trajes grises con portátiles endulzados con café en tazas de plástico son felizmente amenizados por él. Sergio es  argentino de nacimiento, informático de formación que tiene como profesión ser hincha de San Lorenzo de Almagro.

Sergio en el Estadio Pedro Bidegáin, 10 de junio de 2001, San Lorenzo 2 – Unión de Santa Fe 1.

No sé muy bien por qué razón siempre he tenido una fuerte atracción por el fútbol argentino. Tal vez porque la primera imagen que tiene mi memoria de un mundial de futbol es la de Maradona levantando la Copa del Mundo. Los éxitos de la selección española de futbol son algo novedoso para gente de mi generación, de hecho, muchos de los futboleros de mi época solíamos tener una segunda selección a la que apoyar para el momento en que España quedaba eliminada del Mundial (que por desgracia solía ser pronto y nunca más allá de cuartos). La mía era Argentina.

A nivel de clubes me encantaba seguir el campeonato argentino, pero nunca tuve una predilección clara. Como apasionado de las terceras vías, soy aficionado colchonero, no me resultaba para nada atractivo el duopolio Boca-River. Un artículo escrito por Jorge Valdano (al que tengo grandísima admiración y respeto) donde relataba su predilección por Racing de Avellaneda me decantó en un primer momento por el equipo de blanquiazul. Pero Sergio me cambió para siempre y hoy no puedo no desear que San Lorenzo gane el campeonato argentino y la Copa Libertadores.

Siempre he tenido la impresión que Sergio, hace todos los días un viaje continental desde el barrio bonaerense del Boedo a una oficina madrileña en el distrito de Hortaleza. Su casa en el municipio de Coslada es un reducto de Argentina. Su pasión por San Lorenzo de Almagro es admirable, una reivindicación enérgica de sus raíces. Muestra con orgullo una foto en la que aparecen su hija recién nacida, su padre y él con la bandera de San Lorenzo, comentando con orgullo “mira tres generaciones de cuervos”, cuervos es  como coloquialmente se conocen a los hinchas de San Lorenzo.

Sergio es ante todo una persona de equilibrio emocional, cariñosa y atenta, de verbo fluido  y cultivada. Una conversación de fútbol con él supone recibir un torrente  de información. Como he comentado antes en  este escrito, con Sergio, aprendes en cada una de las conversaciones que tienes con él. 

Después de diez años compartiendo oficina con Sergio he interiorizado la historia de San Lorenzo de Almagro relatada con pasión por el protagonista de este escrito.  El nacimiento del club tuvo un componente social, fue creado por el eclesiástico Lorenzo Bartolomé Massa con la intención de ayudar a los niños desfavorecidos. Hoy San Lorenzo es considerado como uno de los cinco grandes del futbol argentino, por palmares y por número de seguidores

A Sergio le encanta contar como en la década de los cuarenta su equipo del alma realizó una gira por España que dejó una gran admiración al equipo bonaerense en todo el país. Fue a finales de 1946 y principios de 1947, años complejos en España, recién acabada la segunda guerra mundial en Europa con la derrota de la potencias del eje. El régimen franquista estaba muy aislado internacionalmente, solo la Argentina de Perón rompía la autarquía política del país. En este contexto era muy extraño influencias extranjeras en cualquier ámbito de la vida. San Lorenzo desembarcó en España  tras conquistar el campeonato argentino, era uno de los equipos del momento, para muchos el mejor equipo del mundo en esa época,  desarrollaba un  juego de toque,  pases cortos y combinaciones asombrando  a contrincantes  y aficionados. La gira de San Lorenzo supuso un gran legado para el fútbol español. Para el recuerdo los siete goles que marcó San Lorenzo a la selección española en el partido disputado en “Les Corts” el 1 de enero de 1947.

Foto Marca. San Lorenzo de Almagro contra Atlético Aviación diciembre de 1946.

Otro tema recurrente en las tertulias futbolísticas con Sergio, es la “Vuelta a Boedo”. San Lorenzo juega como local en el Nuevo Gasómetro, sin embargo Sergio siempre habla de ese estadio de forma transitoria y es que San Lorenzo jugó hasta finales de los setenta en el Viejo Gasómetro ubicado en el populoso barrio bonaerense de Boedo. Un ahogamiento financiero, social y político provocado por la dictadura militar a finales de los setenta  obligó al club a vender su estadio, es oportuno recordar para contextualizar estos hechos, que por ejemplo, las madres de la plaza de mayo comenzaron a organizarse y a reunirse en instalaciones de San Lorenzo de Almagro. Desde el día de la venta del Estadio los seguidores de San Lorenzo han querido con cierta obsesión volver a su antiguo campo. En la finca donde se ubicaba el Antiguo Gasómetro existía un supermercado, Sergio con cierto orgullo reconoce que jamás ha comprado en esa superficie comercial. Ese boicot es el reflejo de la lucha del aficionado tradicional contra el Futbol Moderno. Tras largas campañas, en las que Sergio ha participado activamente, el sueño de volver se ha hecho realidad. Se espera que en julio de 2019 San Lorenzo tenga estadio nuevo, ubicado esta vez en el barrio de Boedo. Tal vez esta sea la causa por la que Sergio vuelva a visitar Buenos Aires después de un autoexilio que dura ya más de quince años.

Carnet de socio refundador, por la compra (con donación al club) de un metro cuadrado del predio de Av. La Plata, para volver a tener el estadio en Boedo.

Sergio es miembro fundador de la peña madrileña de San Lorenzo, Osvaldo Soriano, llamada así en homenaje al famoso escritor argentino, apasionado de San Lorenzo que relató su pasión diciendo que “Ser de San Lorenzo es un interminable sobresalto, una carga que se arrastra en la vida con tanto desconcierto y orgullo como la de ser argentino”.  La peña surgió con la intención de demostrar que kilómetros de distancia no imposibilitan disfrutar de su particular locura por  su querido San Lorenzo de Almagro. La peña se creó en un lugar emblemático de la cultura madrileña, el café comercial.

Tuve el privilegio de ser invitado por Sergio a ver un partido con la peña. Fue un día especial. Sergio me recogió en su coche y nos desplazamos a la periferia de Madrid, cerca de Boadilla del Monte. En una Pizzería cerrada para la ocasión se juntaron unas decenas de cuervos para ver el partido de  su San Lorenzo, como curiosidad, el entrenador de ese momento de San Lorenzo era Diego Pablo Simeone. La pasión de todos ellos era altamente atractiva. La conversación entre ellos, el mejor relato de una locura. Fue una gran noche, difícilmente la he podido olvidar.

En esa cita inolvidable Sergio llevaba puesta la camiseta que ilustra este escrito, años después  Sergio me la regaló y paso a ser una de las joyas de mi colección de camisetas. Se trata de una casaca de edición especial. Conmemora el campeonato ganado por San Lorenzo en 2007. De marca Lotto, tiene un diseño a franjas de color azul y rojo que son parte de la historia de San Lorenzo. Se dice que  el fundador del Club, el cura salesiano Lorenzo Bartolomé Massa se inspiró en el azul y rojo del manto de la Virgen María Auxiliadora para crear la camiseta del Club. Sin embargo otras teorías dicen que el azul y rojo se debe a que eran los colores de la camiseta Lorenzo Bortolome Massa cuando creó el club. Independientemente de cual fuera el origen, es una camiseta de solera y peso en el mundo del futbol.

En 2014 San Lorenzo se proclamó campeón de la Copa Libertadores por primera vez en su historia. Por fin el título de clubs más importante de Latinoamérica se alojaría en las vitrinas de San Lorenzo. Sergio derrochaba felicidad, se le vía con una sensación de satisfacción plena. Los amigos de la oficina nos alegramos mucho por él. Le vi plenamente feliz.

El futbol puede darte amarguras pero cuando te da una alegría, es difícil superar ese estado de felicidad. Sergio me ha enseñado muchas cosas, esa alegría puede que sea el mejor regalo que me ha dado.

8 thoughts on “Club Atlético San Lorenzo De Almagro

  1. Excelente, rigurosamente documentado y entrañable el artículo sobre el Club San Lorenzo y la gran persona y amigo: Sergio.
    ENHORABUNA Luis y Esférico.

    1. Muchas gracias Caridad. Estamos totalmente de acuerdo contigo, Argentina es un pilar del futbol a nivel mundial

  2. Gracias Luis.
    Así hemos aprendido algo más sobre el fútbol argentino y las pasiones que desata.
    Un abrazo.

Leave a comment.

Your email address will not be published. Required fields are marked*