A continuación presentamos la crítica cinematográfica del estreno del año. Las Remontadas, de Florentino Pérez Productions. Disfrútenla.

4 de mayo de 2022 / 180 + 30 min / Fantástica, Aventuras

Dirigida por Carlo Ancelotti

Reparto : Courtois; Carvajal, Militao, Nacho, Mendy; Casemiro, Kroos, Modric, Valverde; Vinicius,  Benzema, Rodrygo, Marco Asensio, Vallejo. L. Vázquez y Camavinga

Calificación: 5/5

Recientemente se presentó en el Santiago Bernabéu la última entrega de la trilogía de “Las Remontadas”, con su último capítulo “Hasta el final”. Todas ellas, rodadas en 2022, son una apología del heroísmo, la constancia y la ilusión de pelear por lo imposible. En esta última entrega, el Director Carlo Ancelotti se supera incluso a sí mismo haciendo creer al espectador durante los casi ciento ochenta minutos iniciales que no queda otra salida que la tragedia. Finalmente, con un giro mágico, ya lo adelantó Benzema en el final de la segunda entrega de la saga, la película se convierte en uno de los mayores clásicos del cine fantástico y de aventuras.

Habitualmente, las trilogías que suelen ser catalogadas como históricas, se caracterizan porque su última parte es la que quizá peores valoraciones recibe de la crítica. Entre otras cosas, porque el hecho de tener que poner fin a una historia que ha llegado a enganchar y a emocionar durante dos entregas anteriores, hace que dichos finales nunca sean al gusto de todos; creando siempre descontentos entre los que hubieran elegido otro tipo de desenlace, o bien, no entendían que una historia se alargase tanto en el tiempo. En esta ocasión, el mérito absoluto del director es lograr que esta última parte fuera la más emocionante e impredecible  y la que llevase al delirio unánime  a una entregadísima crítica.

En esta ocasión, el mérito absoluto del director es lograr que esta última parte fuera la más emocionante e impredecible  y la que llevase al delirio unánime  a una entregadísima crítica.

El motivo fundamental del éxito fue, en parte, debido al acierto de preservar a nada menos que Pep Guardiola,  el villano más poderoso y némesis del Real Madrid en los últimos tiempos,  para la entrega final. Después de tener que lidiar con los desencuentros contra las más altas instancias de la UEFA, el Real empezaba la saga teniendo que superar a los más poderosos jeques u oligarcas con equipos que en ediciones anteriores habían parecido invencibles. Tuvo que ganarlos en circunstancias difíciles. Debiendo remontar resultados adversos en todos los casos.

Una vez más el Real Madrid de Ancelotti se plantaba con sus héroes Benzemá, Vinicius Jr., Courtoise y compañía con un resultado adverso al que enfrentarse. El final de la película obligaba a meter nada menos que dos goles a falta de tan sólo dos minutos para el final del tiempo reglamentario. Circunstancia que debido a lo ya vivido en los capítulos anteriores ante PSG y Chelsea, donde ya se utilizó el recurso de la remontada in extremis, hacía prever al espectador un giro en la rutina del guion y por tanto una derrota final.

Pero el merito del guionista fue el no rehuir el enfrentamiento al más difícil todavía y, con una genialidad que superó a aquella del sorteo fallido de la Champions, en la que el Real Madrid se las prometía muy felices frente al Benfica, decidió escribir una escena trepidante e increíble en la cual, la que podría ser la ocasión que sentenciase el partido con un gol del equipo visitante (ojo que viene un spoiler), se acabaría convirtiendo en una carambola imposible con Mendy como intermediario en la que finalmente el balón no traspasaría la línea de la portería del gran Thibaut. No contento con eso, apenas unos segundos más tarde, un hasta entonces personaje secundario como Rodrygo se convertiría en el héroe del film marcando no uno, sino dos goles en a penas tres minutos. Una genialidad a la altura solo de los grandes guionistas.

(…) un hasta entonces personaje secundario como Rodrygo se convertiría en el héroe del film.

Son muchos los detalles y escenas que pasarán a la historia del celuloide de este film y que elevan la trilogía al Olimpo del madridismo. La primera fue la ovación del Santiago Bernabéu al anuncio del tiempo de descuento en el que era evidente la seguridad en que se iba a consumar la remontada. Le siguió la irrupción del héroe Benzemá, algo anodino durante el partido hasta el momento del penalti final. No se puede obviar tampoco la suma de Vallejo al elenco de actores, que aportaba aun más tensión a los minutos finales y por tanto incrementaba la épica del resultado final. Tampoco se podrá olvidar la cara de los que, una vez más, se frotaban las manos viendo morir en la orilla al Real Madrid y que ahora dirán, una vez más, como en Lisboa, Milán, Cardiff o Kiev, que fue sólo suerte.

En definitiva, con esta “cinta” el Director Ancelotti y el productor Florentino Pérez se arriesgaron en exceso con una apuesta que no ofrecía garantías a priori, pero con la que finalmente han logrado una obra maestra que está a la altura de otras entregas como la de “El Madrid del miedo escénico” o la de “Las Cuatro Champions de cinco posibles”.

Con este final además, el Real Madrid ha logrado que se vuelva a hablar de él con opinión unánime a lo largo y ancho de todo el mundo del espectáculo

En esta ocasión, el club ha demostrado que todo el plantel de directores, actores, productores y demás asistentes, a pesar de no contar con estrellas de antaño,  deben ser tenidas muy en cuenta. Con este final además, el Real Madrid ha logrado que se vuelva a hablar de él con opinión unánime a lo largo y ancho de todo el mundo del espectáculo y recuperar una hegemonía en lo que a la opinión pública se refiere que quizá el Barcelona de Messi, acompañado todo sea dicho de una benevolencia poco habitual por parte de la crítica, le había arrebatado en los último años.

Por si no fuera poco, este Real Madrid amenaza con algo inaudito en el mundo del celuloide, que es atreverse con una cuarta parte de la saga que cierre una historia increíble y seguramente irrepetible. Aunque con el Real Madrid de por medio nunca se sabe… veremos que pasa el 28 de mayo.