Chile se ha proclamado campeón de la Copa América en dos ocasiones. Exito que demuestra como el fútbol chileno está evolucionando. Revindicamos en este escrito a una selección que ha cambiado la historia del fútbol de su país

Si hay un territorio en el mundo en el que el contraste se plasma con cotidianidad, ese territorio es Chile. Su fina y lineal extensión geográfica hace convivir en un mismo país desiertos infinitos con fiordos y glaciares que anticipan el fin del mundo.

El contraste se percibe como algo rutinario en el día a día de Chile, de hecho la historia del país andino nos ofrece episodios de oscuridad  y de luminosidad de manera sucesiva y persistente. Como no podía ser de otra manera el fútbol chileno también ha palpitado a lo largo de su historia de una manera dispar.

El deporte más popular en Chile es el fútbol. El fútbol desembarcó en tierras chilenas a finales del siglo XIX a través del puerto marítimo de Valparaíso. Los marineros ingleses que recalaban en la ciudad comenzaron a organizar partidos del nuevo deporte en los malecones y hangares del puerto. Poco a poco la práctica del fútbol fue cautivando a los chilenos surgiendo el primer equipo de fútbol del país, el Santiago Wanderers de Valparaíso, el 15 de agosto de 1892.

“No ganar” se convirtió en algo normal para Chile. Estar presente era el único consuelo.

El primer partido de la selección nacional de Chile se disputó en 1910 su rival fue Uruguay. En 1916 Chile participó en el primer torneo continental de fútbol, la primera edición de lo que actualmente se conoce como la Copa América. El país andino se convirtió junto con Brasil, Uruguay y Argentina en miembro fundacional del torneo y de la Confederación  Sudamericana de Fútbol.

Chile ha sido un participante activo en el concierto futbolístico internacional, disputó su primer mundial en 1930 en Uruguay, ha conseguido clasificarse para nueve campeonatos mundiales incluso en 1962 organizó con éxito el Campeonato Mundial de la FIFA.

Foto de Solofutbol.cl Formación de la selección chilena de fútbol en 1981

Sin embargo la presencia activa de Chile en torneos internacionales como Copa América y Mundiales, convivía con cierta amargura para los aficionados chilenos. Sus vecinos más próximos, Uruguay, Brasil y Argentina cosechaban éxitos y levantaban con cierta asiduidad los trofeos de Copa América y Mundial. Éxitos que parecían lejanos en el fútbol chileno. La realidad  futbolística para Chile era dura, vivía en un segundo plano respecto a sus contiguos.

La vitola de comparsa y atrezo ha acompañado a Chile en los grandes torneos de fútbol. Siempre una fatalidad o un cumulo de mala suerte privaban a la “Roja” de disfrutar las mieles del éxito. El penalti de Carlos Caszely en el Mundial de España 82.  El cruce con el Brasil de Ronaldo en el Mundial de Francia 98 que impidió a la gran delantera formada por Zamorano y Marcelo Salas alargar su camino en el Mundial. La derrota con Venezuela en cuartos de final de la Copa América 2011 tras adelantarse con gol de Suazo en un campeonato que parecía que llevaba su nombre escrito. Siempre había algún inconveniente que impedía a los chilenos disfrutar de la gloria futbolística de su selección. “No ganar” se convirtió en algo normal para Chile. Estar presente era el único consuelo.

La selección chilena formada entre otros jugadores por Arturo Vidal, Alexis Sanchez, Claudio Bravo o Gary Medel conquistó  la Copa América de 2015 y la Copa América del Centenario de 2016. Este equipo dio gloria a un país necesitado de éxitos futbolísticos. Pero lo más importante dotó a la camiseta Roja de Chile de respeto internacional y personalidad.  

Sin embargo, un grupo de jugadores, cambió la historia del fútbol de su país para siempre. La selección chilena formada entre otros peloteros por Arturo Vidal, Alexis Sanchez, Claudio Bravo o Gary Medel conquistó la Copa América de 2015 y la Copa América del Centenario de 2016. Este equipo dio gloria a un país necesitado de éxitos futbolísticos. Pero lo más importante dotó a la camiseta Roja de Chile de respeto internacional y personalidad.

Foto Fox Deporte

El semillero del éxito comienza con la llegada de un loco entrenador, Bielsa, que con una personalidad infinita y unos valores especiales armó los mimbres de un equipo de época. Los primeros vestigios se vieron en el Mundial de Sudáfrica de 2010. Ese mundial acabaría ganándolo la selección española, que sufrió lo indecible para doblegar a Chile en fase de grupos. Cuatro años más tarde en el Mundial de Brasil, Chile ganaría con solvencia a la España campeona del Mundo. Ya no estaba Bielsa, pero su discípulo Sampaoli confeccionó un equipo que a punto estuvo de apear a Brasil de su mundial repitiendo el histórico “Maracanazo”, un remate al larguero de Pinilla y una fatídica tanda de penaltis volvieron a dejar en la retina el infortunio de la selección chilena en los grandes eventos futbolísticos. Lo normal hasta entonces.

La  nueva generación de futbolistas chilenos era diferente y lo iban a demostrar. Un año más tarde, en 2015 y en un Estadio Nacional de Santiago repleto de camisetas rojas, Claudio Bravo alzaría la primera Copa América de fútbol para Chile. La final contra Argentina se decidió en la tanda de penaltis. En esta ocasión no hubo infortunio y lamentaciones, los jugadores de la Roja estaban reescribiendo la historia futbolística de su país.

Foto de Todo Imagen

Pero los éxitos de esta selección no se detuvieron ahí, un año más tarde, el equipo chileno volvería a emocionar de nuevo a sus compatriotas. En el banquillo ya no estaba Sampaoli, le sustituyó otro entrenador argentino, Juan Antonio Pizzi,  que mantuvo un  estilo futbolístico ofensivo y de toque. Tras un campeonato excelso, con brillantes actuaciones como la goleada por 7-0 a México, Chile volvería a ganar la Copa América. La final nuevamente contra la Argentina de Messi. El desenlace llegaría otra vez a la tanda de penaltis y de nuevo Chile vencería a sus fantasmas históricos. Con esta victoria Chile reafirmó su dominio continental. Su selección se convirtió en un equipo de época y entró en la historia del fútbol.

Chile donde el contraste anida armónicamente no debe olvidar los éxitos cosechados ni a los héroes que lo han logrado. En estos días y tras la dura derrota sufrida con Perú en las semifinales de la Copa América, la luz que dio brillo al equipo chileno de fútbol parece que se apaga dando paso de nuevo a las tinieblas. Pero Chile ya ha sido campeón, y eso hace que ya nada volverá a ser como antes. La historia de fútbol chileno ha cambiado para siempre. Un grupo de jugadores han demostrado que Chile sabe ganar jugando al fútbol. Su legado será eterno.

Leave a comment.

Your email address will not be published. Required fields are marked*