El lunes 14 de enero se celebró la quinta edición de los premios Panenka. Esférico tuvo el inmenso placer de poder asistir a la fiesta. El acto se celebró en Barcelona en la Antigua fábrica de Cervezas Damm.  El evento no podía tener mejor reclamo fútbol y birras, dos de las pasiones de los integrantes de Esférico.

La ceremonia estuvo aderezada por el cómico Leo Harlem que dinamizó con una reguero de risas una velada llena de emociones.

Los galardones de la Revista Panenka tienen un carácter muy especial, se tratan de los únicos premios en nuestro país dedicados a la cultura futbolística.

Desde Esférico queremos valorar y reconocer a la gente que hace posible la Revista Panenka, gracias a sus iniciativas esta revista se ha convertido en un referente y un icono de la cultura popular web de perfil futbolero. Proyectos como nuestro querido Esférico no se entienden sino es por la existencia de un referente como Panenka.

Los galardones de la Revista Panenka tienen un carácter muy especial, se tratan de los únicos premios en nuestro país dedicados a la cultura futbolística. 

El fútbol como casi todo en la vida pude ser percibido de innumerables maneras. Panenka desde hace años nos transporta con sus escritos a países, épocas y costumbres. La Revista Panenka apareció en nuestros quioscos hace ya unos cuantos años y gracias a ello muchos futboleros de este país hemos podido conectar el fútbol con la sociedad, la cultura y la diversidad que se esconde detrás de un balón. Es más que elogiable que este grupo de intrépidos bigotudos respetaran al fútbol de la forma que se merece este maravilloso deporte. El futbol es algo intrínseco a la sociedad y no puede verse como algo ajeno a su cultura.

La gala del pasado lunes reflejó de manera fidedigna esta manera de enlazar fútbol y cultura.

El premio Panenka al fotógrafo del año recayó en Pablo Garcia, un madrileño del periférico barrio de Villaverde, fotógrafo de raza, comprometido con causas imposibles, así lo demuestran sus viajes a áreas de conflicto como Irak. Pablo es un entusiasta del fútbol, fotógrafo de la selección española, preside un club de fútbol en su barrio de origen que tiene como objetivo la integración social y el deporte mixto de niños y niñas.

El Panenka al libro del año lo obtuvo “Todo Messi” de Jordi Punti, un relato sentimental y pasional sobre el jugador argentino. El libro trata de analizar al mito desde la perspectiva del aficionado, el genial periodista revindicó el sentimiento narrativo, enfatizó la pulsión del escritor, que ante los hechos que percibe, como por ejemplo un gol de Leo ante el Espanyol, necesita contar lo que siente. Puntí reflexionó sobre el astro rosarino, dejó claro que su libro estaba incompleto casi desde su nacimiento ya que Messi, su fútbol y los sentimientos que generan sus gambetas tienen todavía mucho camino que recorrer.

El premio a la pieza periodística del año cruzo el charco en esta edición, el Premio Panenka lo recibió el periodista argentino del New York Times, Martín Caparros. A través de un vídeo grabado Martín Caparros realizó un relato agridulce del actual mundo del fútbol, especialmente centrado es su Argentina natal. Desde la visión de un aficionado que ama el fútbol, revindicó el juego en sí y criticó la banalización de la pasión desmedida. El fútbol es maravilloso, pero no es el fin de todo.

La gala del pasado lunes reflejó de manera fidedigna esta manera de enlazar fútbol y cultura.

Como en las últimas ediciones se hicieron menciones especiales a la afición y gesto del año. La afición de la Real Sociedad debido a su homenaje a Aitor Zabaleta y el Málaga Club de Futbol, por sus actos solidarios con las inundaciones de octubre recibieron estas menciones especiales. En un terreno más humorístico se eligió el momento surrealista del año en el mundo del futbol, como no podía ser de otra manera, el saque de banda del jugador iraní Mohammadi en el pasado mundial se llevó este satírico elogio. También hubo tiempo para las redes sociales, se hizo mención especial al tuit de Ana Romero jugadora del Betis femenino. La jugadora sevillana encadenó dos tuits con mucho contenido. El primer tuit de Ana Romero fue una respuesta al cantante Alejandro Sanz que pedía más presencia femenina en el fútbol, la sevillana respondió al cantante que mujeres en el mundo del futbol ya había si bien no tenían suficiente visibilidad. Este tuit fue contestado por un usuario con cierto desprecio, para él ni el fútbol de chicos ni el de chicas eran importantes, importantes eran los matemáticos, los médicos, ingenieros, etc. Ana Romero le agradeció el tuit diciéndole que ella es aparte de futbolista también médico. Un “zasca” en toda regla como se dice coloquialmente.

La fiesta de concluyó con la entrega de Los premios Antonin de Honor, del año y especial a Vero Boquete, Santi Cazorla y Andres Iniesta respectivamente. El colofón lo puso la tertulia dirigida por Aitor Lagunas con estos tres futbolistas. Una charla distendida, relajada, donde se ofreció una bonita visión del futbol. Se ensalzó la superación personal, la amistad y la globalidad que este deporte había ofrecido a estos tres genios del futbol.

El evento se cerró con unas cervezas y algo de “picar”, el lugar ayudaba a crear una atmosfera más que agradable.

Barcelona vivió gracias a Panenka una estupenda jornada de birras y fútbol, nada más se podía pedir. Un placer para Esférico estar ahí. El año que viene intentaremos volver.