Analizamos la histórica victoria del Atletico de Madrid contra el Real Madrid en la final de la Supercopa de Europa. Las posibles consecuencias de esta victoria y la ilusion con la que los atélticos afrontan una temporada en la que la final de Champions se disputa en su flamante nuevo estadio.
El Atletico de Madrid se proclamó campeón de la Supercopa de Europa. Un éxito y un logro importantes para el club. Se trata de la tercera Supercopa de Europa que alza el conjunto colchonero. Si hacemos una reflexion onesta, todos los atleticos sabemos que se trata de un título menor, cualquiera de nosotros elegiría culquier otra copa que besar. En este caso, la Copa era lo secundario, el reto era el rival y el contexto de ser una competición europea.
El Atlético de Madrid vence al rival que en cuatro ocasiones en los últimos cinco años le ha apeado de conquistar la ansiada Champions League. El hecho es importante, las consecuencias deberían ser más.
Dejando al margen la historica rivalidad que existe entre “indios” y “vikingos” y pasando de puntillas por cierto recelo que de por sí tenemos los atleticos a nuestros vecinos madridistas, el hecho es que la victoria del pasado miercoles supone para el Atletico de Madrid vence al rival que en cuatro ocasiones en los últimos cinco años le ha apeado de conquistar la ansiada Champions League. El hecho es importante, las consecuencias deberían ser más.
Todos sabemos que la temporada 2018-2019 arranca con un sueño para los atélticos, la imagen del deseo es clara una copa orejona y un estadio nuevo con asientos rojos. La final de la Champions en el Metropolitano puede ser la culminación de una ambición que tanto añoramos y que tan cerca hemos estado.
El Atleti jugó la Supercopa de Europa, lo hizo como vencedor de la Europa League, un éxito sin lugar a dudas, pero un triunfo que nace de un fracaso previo.
En este contexto debemos ser claros, para poder ganar una Champions League, necesitamos desprendernos de ciertos complejos. En el subcosciente de todos los atléticos estaba que en el último lustro habiamos perdido cualquier enfrentamiento en competicion europea con el Real Madrid. Las dolorosas finales de Lisboa y Milan, unos cuartos y unas semis habían siempre acabado con victoria merengue. La victoria del miércoles ha sido la primera victoria rojiblanca, por fín el Atlético de Madrid da un zarpazo al Real Madrid en una competición europea.
La conquista de la Supercopa supone la plasmación de una posibilidad real, vencer al Real Madrid en Europa puede suceder. A partir de este hecho se abre una ventana que invita a poder soñar.
El Real Madrid ha sido el absoluto dominador de la Copa de Europa en los últimos cinco años, ha conquistado cuatro copas de Europa en este tiempo, vencerles supone un espaldarazo al proyecto y a mantener la idea de que el Atlético de Madrid ha alcanzado un status de primer nivel en el futbol europeo.
El miércoles el Atlético se jugaba demasiadas cosas, no solo la Supercopa.
Para dar mas énfasis al triunfo del miércoles reflexionemos porque el Atleti jugó la Supercopa de Europa, lo hizo como vencedor de la Europa League, un éxito sin lugar a dudas, pero un triunfo que nace de un fracaso previo. Qrabag, recordemos ese nombre, la falta de competividad del Atleti contra los azerbayanos condenó al equipo de Simeone a no continuar en la Champions y recalar en la Europa League. La eliminación de la Champions fue dura. Nueve meses despues, hemos podido ver como la reacción del equipo ha sido estelar. Rehacerse a un golpe como esa eliminación no es fácil, conquistar la Europa League reflejó que lo sucedido fue un simple accidente y la victoria del miércoles nos indica que el lugar del Atleti está compitiendo con los mejores del futbol eurpeo.
El miércoles el Atlético se jugaba demasiadas cosas, no solo la Supercopa. La derrota hubiera dejado demasiadas dudas. El hecho es que Atleti deseó ganar esa Copa, se quiso demostrar que también en Euopa puede ganar al Real Madrid y que el tropiezo del pasado año en Champions fue un desliz sin más. El sitio del Atleti está compiendo con los mejores. El miércoles se ganó algo más que una Supercopa de Europa.